Segunda semana de mayo. La fantasma de lo por venir

Lunes 5 de mayo de 2014
Como ya no se hace obra pública, los consejeros merodean por empresas, contratas y naves, prestos a sacarse fotografías con (o delante de) gente con empleo.

Martes 6 de mayo de 2014
Al final los que nos pillamos los dedos con el ladrillo fuimos nosotros, la inmensa mayoría de los constructores se forraron para nueve o diez generaciones. Ahora, échenles un galgo.

Miércoles 7 de mayo de 2014
Empiezo a estar un poco harto de este tipo de noticias: se venden tres coches más que en la primera quincena, se crean una docena de puestos... Cualquier día van a abrir los telediarios con la prosperidad de las alcantarillas, la normalidad en las tapas de registro y la abundancia y regularidad de los lixiviados (por ejemplo).

Jueves 8 de mayo de 2014
Las encuestas. Las siempre fiables encuestas.

Viernes 9 de mayo de 2014
A nuestro presidente le da lo mismo la caseta de feria en la que le coloquen o la atracción que tenga que publicitar; no va a cambiar su estilo demagógico, festivo y cóncavo.

Sábado 10 de mayo de 2014
Se ha abierto la veda de la patraña y se ve, se lee y se escucha a personas que deberían estar estudiando, soltar disparates muy grandes. Roto el tabú, proliferan las reliquias y los prodigios. Propiciando y, me temo, haciendo inevitables las apariciones marianas y las naves celestes.

Domingo 11 de mayo de 2014
No lo entenderé nunca. A la gente la política le importa (y le molesta, como es natural) muchísimo. Menos justo en el momento en que les preguntan. En ese instante les brota una indiferencia que acabamos pagando los demás.